En la práctica, los mercados internacionales están afectados por una multitud de políticas que afectan la libre actividad de exportadores e importadores: tasas y aranceles al ingreso o egreso de bienes y servicios, retenciones a la exportación, subsidios a determinadas importaciones o exportaciones, cuotas que limitan las cantidades físicas que se pueden comerciar, y barreras para arancelarias, como controles sanitarios, especificaciones de envasado y otras.
Estas disposiciones tienen como efecto relevante, desde nuestro punto de vista de la evaluación social, la aparición de una “cuña” entre el precio de oferta y el de demanda. Esto, a su vez, agrega un factor de diferenciación entre el valor y precio privados y el valor y precio sociales.
Los pasos para la valoración son los siguientes:
• Ajustar los precios de mercado para suprimir el efecto de las tarifas, impuestos, subsidios y otras restricciones. El precio de mercado incluye cualquiera de las distorsiones mencionadas; sin embargo, las mismas son transferencias entre las partes (del exportador o importador al gobierno o viceversa). En consecuencia, no son relevantes para la valoración social, y deben descontarse del precio apropiado (precio FOB para las exportaciones y precio CIF para las importaciones).
• Valorar cada unidad de divisa generada o demandada al tipo de cambio social: Hasta ahora habíamos supuesto que el tipo de cambio privado y social coincidían. Sin embargo, muchas veces ese no es el caso. En consecuencia, la valoración social de las divisas debe hacerse al tipo de cambio que refleje la “verdadera” valoración (costo) social de una divisa generada (utilizada) en el proyecto, esto es, el tipo de cambio social.
• Ajustar por los costos de transporte y manipuleo: Los pasos anteriores valoran al bien en la frontera. Para valorarlos en el proyecto, debemos adicionar los costos de transporte, si se trata de un insumo importado, y deducirlos, si se trata de una bien de exportación.
Apuntes de la materia de Preparacion y Evaluacion de Proyectos.
viernes, marzo 31
jueves, marzo 30
El caso sin distorsiones - Costo social de los bienes que el proyecto importa (II)
El costo social de las nuevas importaciones, en el sitio del proyecto, se valora utilizando el precio internacional corregido por el flete, al tipo de cambio social.
Nuevamente, el costo social de demandar un insumo importado son las divisas comprometidas en la adquisición del mismo. De la comparación del cálculo del valor social de la producción y del costo social del insumo surge claramente lo que expresáramos antes: generar divisas (o utilizarlas) no es “puro” beneficio (o costo), sino que depende del uso que se les dará a las mismas. Esto se ve en el siguiente ejemplo.
Un proyecto genera el bien que estudiamos en el Gráfico 14, y para hacerlo demanda como único insumo el analizado en el Gráfico 15. En el país se considera conveniente implementar ese proyecto, debido a las divisas generadas.
De la comparación de ambos gráficos, realizados en la misma escala, surge claramente que las divisas generadas por el proyecto son menores que las demandadas. En consecuencia, justificar la conveniencia sólo por la generación de divisas del proyecto es erróneo.
Nuevamente, el costo social de demandar un insumo importado son las divisas comprometidas en la adquisición del mismo. De la comparación del cálculo del valor social de la producción y del costo social del insumo surge claramente lo que expresáramos antes: generar divisas (o utilizarlas) no es “puro” beneficio (o costo), sino que depende del uso que se les dará a las mismas. Esto se ve en el siguiente ejemplo.
Un proyecto genera el bien que estudiamos en el Gráfico 14, y para hacerlo demanda como único insumo el analizado en el Gráfico 15. En el país se considera conveniente implementar ese proyecto, debido a las divisas generadas.
De la comparación de ambos gráficos, realizados en la misma escala, surge claramente que las divisas generadas por el proyecto son menores que las demandadas. En consecuencia, justificar la conveniencia sólo por la generación de divisas del proyecto es erróneo.
miércoles, marzo 29
El caso sin distorsiones - Costo social de los bienes que el proyecto importa (I)
El proyecto puede también aumentar la demanda por importaciones, al utilizar insumos bienes producidos en el exterior. En ese caso, el proyecto agregará su demanda sobre la demanda existente, pagando el precio internacional CIF más las tasas y menos los subsidios correspondientes, más el costo de transporte desde la frontera.
En el gráfico se advierte que la situación sin proyecto y la con proyecto son iguales en términos de precios y cantidades demandadas y ofrecidas por los actores originales; la única diferencia es que el proyecto aumenta las importaciones de esa economía
En el gráfico se advierte que la situación sin proyecto y la con proyecto son iguales en términos de precios y cantidades demandadas y ofrecidas por los actores originales; la única diferencia es que el proyecto aumenta las importaciones de esa economía
martes, marzo 28
El caso sin distorsiones - Valor social de los bienes que el proyecto exporta (III)
Nos conviene aquí resaltar algunos temas que se desprenden de este análisis:
a. Supongamos que el proyecto produce bienes exportables, pero los destina todos al mercado interno: ¿la valoración de esos bienes continúa siendo la misma que si los exportara? La respuesta es afirmativa, pues la producción incremental que el proyecto agrega a la sociedad permite liberar parte de la actual oferta del bien exportable, incrementando las importaciones aunque no sea el propio proyecto quien las haga. De esta manera, el valor social de la producción de un bien exportable no depende del destino final del bien.
b. El ejemplo resalta también el hecho de que, para un bien exportable (o importable, para el caso), el precio internacional funciona como un costo de oportunidad: todo lo que se vende en el mercado interno deja de ser exportado, y por lo tanto representa la pérdida del precio que se habría logrado en el mercado externo. En ausencia de imperfecciones del mercado, el precio interno debería ser igual al precio internacional, para los consumidores.
c. El caso sin distorsiones ni en el mercado del bien, ni en el de divisas – el más sencillo –, nos muestra con claridad que lo que estamos valorando es la generación de divisas. ¿Significa esto que la generación adicional de divisas es un beneficio, al estilo de las ideas en boga en los años ’70? La respuesta es un sí calificado: en efecto, generar divisas es un beneficio, pues amplía la posibilidad de importar y derivar utilidad de ese consumo.
Sin embargo, el análisis que realizamos en esta sección es parcial, pues no toma en cuenta los costos de esa generación de divisas. En efecto, producir ese bien puede ser extremadamente costoso, de modo que el efecto neto del proyecto sea una disminución del bienestar de la población. En consecuencia, la generación de divisas es positiva si “[…] el valor de los bienes que puedan ahora importarse con esas divisas es mayor que lo que le costó al país generarlas”.
a. Supongamos que el proyecto produce bienes exportables, pero los destina todos al mercado interno: ¿la valoración de esos bienes continúa siendo la misma que si los exportara? La respuesta es afirmativa, pues la producción incremental que el proyecto agrega a la sociedad permite liberar parte de la actual oferta del bien exportable, incrementando las importaciones aunque no sea el propio proyecto quien las haga. De esta manera, el valor social de la producción de un bien exportable no depende del destino final del bien.
b. El ejemplo resalta también el hecho de que, para un bien exportable (o importable, para el caso), el precio internacional funciona como un costo de oportunidad: todo lo que se vende en el mercado interno deja de ser exportado, y por lo tanto representa la pérdida del precio que se habría logrado en el mercado externo. En ausencia de imperfecciones del mercado, el precio interno debería ser igual al precio internacional, para los consumidores.
c. El caso sin distorsiones ni en el mercado del bien, ni en el de divisas – el más sencillo –, nos muestra con claridad que lo que estamos valorando es la generación de divisas. ¿Significa esto que la generación adicional de divisas es un beneficio, al estilo de las ideas en boga en los años ’70? La respuesta es un sí calificado: en efecto, generar divisas es un beneficio, pues amplía la posibilidad de importar y derivar utilidad de ese consumo.
Sin embargo, el análisis que realizamos en esta sección es parcial, pues no toma en cuenta los costos de esa generación de divisas. En efecto, producir ese bien puede ser extremadamente costoso, de modo que el efecto neto del proyecto sea una disminución del bienestar de la población. En consecuencia, la generación de divisas es positiva si “[…] el valor de los bienes que puedan ahora importarse con esas divisas es mayor que lo que le costó al país generarlas”.
lunes, marzo 27
El caso sin distorsiones - Valor social de los bienes que el proyecto exporta (II)
El valor social de las nuevas exportaciones, en el sitio del proyecto, se valora utilizando el precio internacional corregido por el flete, al tipo de cambio social.
En consecuencia, estamos diciendo que, bajo estos supuestos, el precio social del bien que el proyecto genera es igual al precio internacional expresado en moneda local, menos el flete.
Reparemos que ese también es el precio privado, si el tipo de cambio social coincide con el privado.
En consecuencia, estamos diciendo que, bajo estos supuestos, el precio social del bien que el proyecto genera es igual al precio internacional expresado en moneda local, menos el flete.
Reparemos que ese también es el precio privado, si el tipo de cambio social coincide con el privado.
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